Una mirada triste siempre muestra el estoy bien, pero en esa mirada o palabras ¿dónde queda la confianza de decir el como se sienten? Hay veces que en el amor uno prefiere estar tranquilo, sufrir en silencio y no demostrar lo mal que uno está; porque aunque la confianza se digna a estar, siempre las consecuencias de los actos hacen que el estar bien, con la mirada triste, los abrazos secos y la soledad inundando el ser.
¿Dónde queda el amor? He ahí las cosas, aunque uno tenga amor, le recalquen que se está haciendo todo bien, siempre va a pesar un error, la emoción de verse tiene que demostrar en los abrazos, aunque sea en el momento de despedida; pues si todo está perdido ¿para qué seguir sufriendo en algo que no les llena? Pues las palabras amor, bebe, vida, en fin; demasiadas palabras de cariño va disminuyendo por decir estoy bien y estar con esa mirada triste.
¿Qué esta pasando? Un nuevo reinicio, una culminación de algo que ha dañado o no sé, de decisiones que permita crecer como seres humanos, pero sobre todo que el amor, aunque exista una mirada triste, se demuestre en abrazos lo que anhelamos, lo que queremos día a día, que sea ese Te Extraño, aunque la mirada triste emane en lo que nos rodea o en los silencios de una conversación que rodea la alegría de un reencuentro.