Amistad

Algo que he aprendido sobre la amistad, es que se elige con quien compartirla, ya que hay gente mal agradecido que solo está por la conveniencia, por el simple hecho de tener el conocimiento o el hecho de ser alguien en la sociedad que rodea. Pero no es así, la amistad tiene que ser real, por el simple hecho de que es sincero, donde las mascaras no existen, pero sobre todo la sinceridad está ahí; de igual forma tiene que ser amena, por el motivo que la persona a la cual se le brinda, muestre esa paz y sobre todo fortaleza de estar en el apoyo de la persona.

Aprendamos a ser amigos, por el hecho de que aparte de tu pareja, novio (a) u esposa (o), ellos estarán ahí, quizás para consolarte, para animarte a realizar las cosas, pero sobre todo para acercarte a Dios o te ayude a tener una vida espiritual completa.

A los amigos no hay que dejarlos, por el hecho que se tenga pareja, ellos estaban antes que el o ella. Aparte no hay que tratar mal al amigo que se le apoyó en los momentos más feo, por el hecho de no tener tu forma de vida o de pensar, eso es lo hermoso de una amistad, es complementar las rarezas de la persona con uno y así buscar que la platica y las rizas sean inolvidables. No dejemos que nuestro corazón esté lleno de tristeza por esos amigos que se van, simplemente es encomendar a la vida o a Dios que le vaya bien y que tenga el éxito anhelado, pero sobre todo el amor que todos necesitamos.

Hay una película que se llama LA LISTA DE NO BESAR DE NAHOMI Y ELY, que con su final, demuestra que cada quien decide con quien envejecer o compartir la vida aparte de la que escogemos amar y de la familia, porque uno aprende si van a estar o no en nuestras vidas con su presencia.

El amor es... Decisión.

Cuando hablan del amor, lo asemejan con un sentimiento, porque si fuera así, nadie se casaría, porque los sentimientos se van con el tiempo cuando ya no llenan todo lo que se había conocido de la persona. Los sentimientos solo vienen del corazón, de lo que realmente la razón quiere mostrar, con el abrazo o un beso o un detalle.

El amor es más que eso, para mi (de lo que tengo aprendido) es una decisión, pero ¿por qué? Un predicador, en un retiro sobre cuaresma, nos explicó que Jesús por lo que sentía el se hubiera ido cuando lo estaban amenazando con matarlo, pero no, el decidió quedarse (aún con miedo) y dar lo mejor de su persona. En la vida actual lo vemos asemejado, cuando decidimos terminar una relación por el simple hecho que ya no nos llena o por conocer a alguien más, pero de igual forma cuando se decide ya no sufrir o pensar enfocado en el amor, es allí cuando aceptamos amarnos; pero de igual forma de su condición física, su forma de pensar y las acciones que realizan para uno, es cuando decidimos darnos esa oportunidad para estar ahí.

Para mi, siempre ha sido así, el amor es una decisión, que es más de un sentimiento, te ayuda a tener fuerza de voluntad, es incondicional, sin distinción alguna y es eterno. Aunque cada quien tiene el suyo y con el tiempo va aprendiendo a tener su propio concepto de ello.